Las placas de polietileno se caracterizan por su baja absorción de agua que es mucho menor que 0.01%.
Las placas de polietileno son mayormente utilizadas para revestimiento en silos de carbón, yeso, cemento; en volquetes, y tambores de mezcla de acero, electricidad, cemento, carbón para la industria de minería, y otras industrias más. Con el uso de las placas de polietileno se pueden reducir problemas tales como adhesión, desgaste, abrasión y baja productividad. Al polietileno se le considera como uno de los mejores plásticos para resolver los problemas ya mencionados; además sus precios son asequibles.